La reconstrucción de la mama tras su extirpación por cáncer de mama u otra enfermedad (mastectomía) es uno de los procedimientos quirúrgicos actuales dentro de la cirugía plástica más gratificantes para la paciente.
El desarrollo de nuevas técnicas y materiales médicos posibilitan al cirujano plástico crear una mama similar en forma, textura y características a la mama no operada. La reconstrucción mamaria tiene como fin:
Cuando la reconstrucción de la mama se hace al mismo tiempo que una mastectomía, la cirugía completa puede durar de 8 a 10 horas. Cuando se realiza como una segunda cirugía, puede demorar hasta 12 horas.
El proceso de reconstrucción mamaria puede comenzar al momento en que te realizan la mastectomía (reconstrucción inmediata) o se puede realizar posteriormente (reconstrucción retrasada). El proceso de reconstrucción mamaria generalmente requiere dos o más operaciones. También puedes esperar diferentes consultas durante dos a tres meses posteriores a la cirugía inicial para expandir y estirar la piel de tu pecho en preparación para el implante.
Se realiza bajo anestesia general.
Durante varias semanas posteriores a la cirugía, podrías sentirte cansada y dolorida. El médico te recetará medicamentos para ayudarte a controlar el dolor.
Retomar las actividades normales puede llevar seis semanas o más. Durante este período, toma las cosas con calma.
El médico te informará si debes restringir tus actividades, por ejemplo evitar levantar objetos sobre el nivel de la cabeza o realizar actividades físicas extenuantes. No te sorprendas si la recuperación tras la cirugía parece llevar mucho tiempo: puedes tardar incluso hasta uno o dos años en sentirte completamente curada.
Por lo general, deberás hacer consultas de seguimiento anuales con el cirujano plástico para controlar la mama reconstruida después de que se complete la reconstrucción. Sin embargo, pide una consulta antes de que se cumpla ese tiempo si tienes dudas acerca de la reconstrucción.